Windows 7 no tiene soporte desde hace tiempo, pero sigue siendo uno de los sistemas operativos más utilizados por muchas razones: es ligero, tiene una alta compatibilidad y funciona bien incluso con un hardware muy antiguo. También es un sistema operativo que gracias a las últimas actualizaciones que recibió es capaz de funcionar bien con hardware potente.
Para poder mover Windows 7 Microsoft indicaba unos requisitos asequibles, una CPU a 1 GHz (un núcleo), 1 GB de RAM para la versión de 32 bits y de 2 GB para la versión de 64 bits. A pesar de que esos son los requisitos mínimos, este sistema operativo ha funcionado en configuraciones inferiores, y ahora una nueva prueba ha demostrado que puede correr en una CPU Pentium S a 5 MHz con 128 MB de RAM.
Windows 7 funciona con esa configuración, pero tarda casi media hora en iniciar, así que no es realmente viable para un uso normal. Este experimento se llevó al extremo cuando el autor intentó iniciar Windows 7 con solo 36 MB de RAM. Funcionó, fue posible, pero tuvo que editar el archivo de paginación.
Con esos recursos todo va tremendamente lento, pero funciona. Otro logro interesante de este youtuber fue ejecutar Windows XP sobre un procesador a 1 MHz. Para iniciar el sistema operativo hicieron falta tres horas. Este tipo de pruebas son muy curiosas y demuestran lo versátiles que son los sistemas operativos de Microsoft a nivel de hardware cuando se ajustan un poco. Windows XP necesitaba un procesador a 233 MHz y 64 MB de memoria RAM, esos eran sus requisitos mínimos.