Las pruebas las vamos a realizar, pero de entrada podemos intuir que el rendimiento de esta APU debería ser extremadamente discreto. Aún y así, intentaremos situarlo en alguna línea determinada, y para ello compararemos los resultados de las pruebas con los que obtuvimos en su momento del Ryzen 5 3400G, una APU con GPu integrada que lo supera en rendimiento, sí, pero que nos permitirá saber por dónde podemos situarnos aproximadamente, y así podernos hacer una idea.

Primero de todo, decir que con la instalación de los drivers pertenecientes a lo último que veamos en la web (no se requieren drivers especiales para este modelo concreto) podremos ver exactamente lo que tenemos:




La GPU merece una captura aparte, y GPU-Z tiene algunas cosas que decir al respecto... Fijaos que la GPU toma prestada su memoria de la DDR4 instalada:


Os dejamos aquí la lista de hardware y software empleado para la ocasión:
Hardware:
- Placa base GIGABYTE AB350N-Gaming WiFi
- AMD Athlon 3000G
- AMD Ryzen 5 3400G
- RAM 16 GB DDR4 G.Skill Trident Z Neo @ 2.133 MHz
- OCZ Trion 150 960 GB
- Enermax MAXREVO 1.300 W
- Disipador AMD Wraith
Software:
- Windows 10 x64 (actualizado)
- AMD Crimson ReLive 17.7
- DirectX Redist junio 2010 + DirectX12
- 7 Zip 16.04
- WinRar 5.40 x64
- Cinebench R15
- CPU-Z 1.83.3 x64
- PC Mark 10
- Sisoft Sandra 2017 Platinum
- Fritz 4.3
- AIDA 64 Engineer
- 3D Mark
- Gears of War 4
- HITMAN
- Rise of the Tomb Raider
- Shadow of Mordor