El culebrón por el emulador Yuzu está lejos de acabar. Nintendo y los responsables del emulador llegaron a un acuerdo que suponía la supresión del proyecto y de todo lo relacionado con él, incluida su web, y el pago de 2,4 millones de dólares a Nintendo como indemnización.
Esto no generó polémica. Es normal y lógico que quieran pasar página cuanto antes y evitar un conflicto legal con Nintendo que podría costarles millones de dólares, el problema ha venido porque se ha descubierto que Yuzu hacía un seguimiento de sus usuarios mediante un sistema de telemetría que le daba mucha información sobre lo que hacían estos.
Se desconoce exactamente cuánta información tenían los responsables de Yuzu de sus usuarios, pero parece que esta podría contener datos de pago de las cuentas de Patreon e incluso detalles que podrían apuntar a piratas que fueron clave para la filtración de juegos antes de su lanzamiento. Si todo esto resulta ser verdad, Nintendo tendría una lista de información importante que le permitiría demandar a los responsables de la filtración y la piratería de algunos de sus juegos más importantes.
Las redes están ardiendo ahora mismo con este tema. Algunos echan la culpa a Nintendo, pero la compañía japonesa ha hecho algo legítimo, proteger su propiedad intelectual de la manera que la ley se lo permite. Yuzu, por otro lado, recopiló grandes cantidades de información de sus usuarios, sabía que Nintendo iba a descubrir cosas feas en esos datos, y por eso estuvo abierta desde el principio a un acuerdo aceptando sus exigencias.
Quizá en las próximas semanas aparezcan nombres de personas implicadas en este asunto que acaben siendo demandadas por Nintendo, aunque solo sea por dar ejemplo y que este sirva para prevenir situaciones similares en un futuro.
