Joseph Moore, analista de mercado de Morgan Stanley, ha publicado un informe en el que arroja una previsión de los ingresos con los que podría cerrar AMD en 2022 dentro del sector de los PCs de escritorio, y esta no es nada buena ya que prevé una caída de hasta un 26%.
Esa caída de hasta el 26% en ingresos se obtiene haciendo una comparación con 2021, un año que fue especialmente bueno para AMD no solo por el éxito que tuvieron los Ryzen 5000, sino también por la buena situación del mercado del PC debido a la alta demanda generada todavía por la COVID-19.
En 2022 toda esa situación ha cambiado. Los procesadores Ryzen 5000 siguen teniendo éxito, pero llevan desde finales de 2021 afrontando la competencia de los Intel Alder Lake-S. Esa competencia se ha notado, y mucho, porque AMD ha bajado el precio de sus procesadores y además ha lanzado nuevos modelos en un intento de no dejar sola a Intel en el mercado de gama baja y de gama media económica.
La competencia de Intel no es el único motivo que cita Moore como causa de esa bajada de los ingresos de AMD para 2022, pero es una de las razones más importantes. Puede que AMD sea también consciente de esto, y que por eso esté considerando el lanzamiento de procesadores Ryzen 7000 compatibles con placas base AM4. Aunque la previsión de este analista tiene una buena fundamentación, es solo eso, especulación argumentada, así que hasta que no veamos los resultados financieros de AMD es imposible dar nada por seguro.
Por otra parte, es necesario tener en cuenta que puede que AMD recupere terreno gracias a los Ryzen 7000, y que el lanzamiento de estos procesadores le permita amortiguar esa posible caída de sus ingresos en 2023.
