En PCGamer encontramos una curiosa noticia que nos habla sobre el sistema para detectar tramposos en sus juegos, en la mayoría de casos en su popular: Counter Strike: Global Offensive (CS:GO). Se trata del Valve Anti-Cheating, más conocido com VAC.
Nos comentan que en 2014 CS:GO (tercera entrega de la popular saga) se convirtió en el FPS multijugador más jugado del mundo y por lo tanto también uno de los más codiciados para conseguir alguna herramienta que permita hacer trampas y ganar a los competidores.

Para detectar el uso de programas que permitan hacer trampas, los cheats, Valve va perfeccionando su herramienta de detección VAC con sistemas sofisticados que aprenden para detectar nuevas versiones de forma más eficaz y rápida ya esos mismos han ido mejorando a medida que pasa el tiempo. Así pues han creado la VACnet ya que consideran los cheats como el mayor peligro para su juego.
La VACnet es un sistema de multiples procesadores, dicen que alrededor de 1.700 y con enorme capacidad de crecimiento (en la imagen se ven 3.456, ya que han comprado el doble para poder ampliar su sistema cuando haga falta), que se dedica a analizar las repeticiones de las partidas jugadas, a través de Overwath, y que han sido catalogadas como fraudulentas tras la denuncia de algún usuario. Comentan que hay unas 600.000 partidas al día sólo en el modo 5 vs. 5, así que realmente hay mucho trabajo si se quiere revisar todo.
Este sistema intenta aprender de forma humana el comportamiento de los jugadores (deep learning) e intenta dilucidar si hay un comportamiento natural o una forma preprogamada para realizar las acciones, intentando ver si hay suerte o trampa en una jugada, si hay visión a través de las paredes, aimbots, etc. VACnet continua siguiendo a los jugadores reportados en subsiguientes partidas para comprobar si la pauta detectada se mantiene o la partida denunciada ha sido una casualidad.

Citan que este sistema automático sigue siendo una especie de delatador, pero no es quien ejecuta la sentencia: terminan siendo las personas humanas que, con la ayuda de VACnet, deciden que un usuario ha hecho trampas e imponen la sanción correspondiente, generalmente una expulsión.
Los creadores reconocen que en 2016 de lo que más se hablaba de CS:GO era sobre los cheats y ahora han conseguido cambiar por completo esa percepción, que el principal cheat a combatir ha sido el de auto-apuntando, examinando donde apuntaba un usuario 0,5 y 0,25 segundos antes de un disparo y anotando si el tiro ha tenido éxito, y recaudan más de 140 de esas acciones (bautizadas como átomos) de un jugador para determinar si ha utilizado ese cheat.
Citan que los humanos sólo aciertan entre un 15 y un 30% de los supuestos cheats que se ven en su sistema de repeticiones, y en cambio su sistema era capaz de acertar entre un 80 y un 95% de las veces, ahora lo han terminado de depurar y aseguran estar cerca del 99% de aciertos.
Valve quiere que su sistema guste a los usuarios y a las empresas intentando seducir a otros creadores de videojuegos que utilizan Steam para integrar su VACnet y ampliar mercado.