El elemento diferencial de la propuesta GeForce NOW Ultimate es la gráfica GeForce RTX 4080 que NVIDIA pone a disposición de los clientes para jugar con sus títulos favoritos. A esta gráfica se suma un procesador a la altura y una cantidad de memoria RAM también acorde con lo que se necesita para ofrecer una experiencia gaming 4K a 120 fps, con efectos RTX y calidad gráfica muy alta o ultra.

Foto: en los juegos, el hardware detectado pasa por una CPU AMD Ryzen de 16 cores y una gráfica GeForce RTX 4080 con 24 GB de VRAM.
El coste de un equipo con estas características sería de varios miles de euros. Aunque el “truco” de este razonamiento, está en que, con un equipo hardware físico y tangible, podremos abordar muchas más tareas además de jugar con títulos dentro de un catálogo extenso de títulos, pero limitado.
También podemos argumentar, a favor de NVIDIA GeForce NOW Ultimate, que permite que dimensionemos a la baja los requerimientos de hardware gráfico para un equipo PC de alto rendimiento que no esté centrado en el gaming. Así, en vez de comprar una gráfica GeForce RTX 4080, podremos comprar una más modesta que, aún acelerando tareas de edición o autoría multimedia, no esté enfocada en el gaming, lo cual podría ahorrarnos algunos cientos de euros. Bastantes cientos de euros en realidad: una RTX 4080 cuesta unos 1.200 – 1.300 euros, mientras que una GeForce RTX 4060 con 8 GB de VRAM (suficiente para ejecutar apps de IA, por ejemplo), cuesta unos 300 – 350 euros.
A 20 euros por mes para la suscripción Ultimate, tendríamos para 50 meses con los 1.000 euros de ahorro, con la ventaja de tener siempre el hardware gaming más actualizado, a medida que NVIDIA vaya incorporando las más recientes tecnologías de CPU y GPU en sus centros de datos.
Desde dónde podemos acceder a GeForce NOW Ultimate
Uno de los puntos que más ha ido mejorando NVIDIA es la forma de acceder a GeForce NOW. En un principio, años atrás, solo era posible acceder desde los dispositivos NVIIDIA Shield. Ahora, sin embargo, podemos hacerlo desde un PC con Windows, un Mac con Mac OS, desde Chromebooks con Chrome OS o desde un navegador web incluso (Chrome, Safari o Edge). También desde Android TV o televisores Samsung y LG. Desde una tableta o smartphone Android también podremos acceder a GeForce NOW.

Foto: podemos acceder a GeForce NOW desde una amplia variedad de plataformas y dispositivos, incluyendo navegadores. Desde los navegadores tenemos la resolución limitada a QHD o 2K, sin que podamos llegar a 4K, eso sí. Con todo, la experiencia de juego será similar, con la salvedad de que habrá algunos apartados de configuración diferentes.
Algunas opciones de configuración pueden no estar presentes u ofrecer parámetros de configuración menos ambiciosos que con las aplicaciones nativas, eso sí. Pero, esencialmente, podremos jugar con nuestros títulos desde todos esos dispositivos o plataformas.
Configuración de GeForce NOW Ultimate
Si nos ceñimos a las aplicaciones nativas para Windows y Mac, nos encontramos con parámetros de configuración prácticamente idénticas. En concreto, para nuestra suscripción Ultimate, tenemos la posibilidad de definir desde la distribución del teclado hasta las notificaciones sobre el estado de la red, pasando por la conexión con eCommerces de juegos como Ubisoft, Epic Games o Steam. Para PC Game Pass de Microsoft, tendremos que autenticarnos para cada juego al iniciarlo.
Si poseemos el juego que vayamos a jugar en la plataforma correspondiente, se instalará en GeForce NOW y lo podremos jugar. De otro modo, se nos advertirá sobe la ausencia de un título de propiedad que nos permita acceder al juego en cuestión.
Las opciones más interesantes están en la parte de la calidad de la transmisión. Es el apartado clave para conseguir una experiencia óptima en los juegos y está relacionada directamente con nuestra conexión de Internet.

Foto: las opciones de configuración en la aplicación de GeForce NOW contemplan apartados como la resolución máxima o las tasas de frames. También tememos apartados para configurar la calidad del escalado o el HDR, así como si queremos configurar la calidad gráfica en el juego. Si dejamos todo en automático, la experiencia gaming será similar a la de las consolas, donde no tenemos opciones demasiado avanzadas para tunear la calidad de la experiencia gaming.
Tenemos tres opciones predefinidas: equilibrada, ahorro de datos y de competición, más una opción configurable: la personalizada. En la personalizada se desgranan aspectos como la tasa de bits, la resolución, la tasa de fps, la sincronización vertical, la opción “Reflex” para minimizar la latencia, la activación de HDR si tenemos una pantalla compatible o un “switch” para el caso de que las condiciones de la red sean malas, que posiblemente actúen sobre la compresión de los datos.
El ajuste del aumento de escala de la resolución y la posibilidad de ajustar la configuración de gráficos en el juego, completan las opciones de tuneado para los usuarios de la modalidad Ultimate. Si dejamos los ajustes en automático, la experiencia gaming será similar a la de una consola, donde apenas sí tenemos la posibilidad de tunear parámetros de calidad de imagen, por ejemplo. Si nos vamos a la parametrización manual, podremos exprimir al máximo las posibilidades de Ultimate, aunque sea a costa de ir al límite en cuanto a lo que permita nuestra conexión de Internet en aspectos como la latencia o la tasa de bits o las tasas de frames.
Si activamos la configuración de gráficos en el juego, tendremos aún más margen de maniobra para tunear la calidad de imagen, pero, de nuevo, cuanto más maximicemos aspectos como la calidad de los efectos RTX, así como la resolución, nos enfrentaremos a tasas de frames menores. A pesar de que estamos usando una GeForce RTX 4080, en algunos títulos como WatchDogs Legion, si maximizamos todos los parámetros nos encontramos con tasas medias de frames que apenas llegan a los 60 fps.
La experiencia de juego con GeForce NOW Ultimate
Si nos centramos en la experiencia de juego con GeForce NOW Ultimate, anticipando las conclusiones, diremos que es extraordinaria. Hemos hecho la mayoría de la review sobre un MacBook Pro de 15’’ de 2017, sobre todo por su pantalla de muy alta resolución. El rendimiento de este equipo, como puedes intuir, es bastante limitado, con procesador Intel Core i7-7700HQ más gráficos Radeon Pro 555. En este Mac, hemos instalado la app nativa de GeForce NOW, y nos hemos autenticado con nuestra cuenta, en la modalidad Ultimate.

Foto: en tests de rendimiento como el de Far Cry 6, encontramos resultados sumamente satisfactorios con la modalidad GeForce NOW Ultimate. Las tasas de frames responden a una experiencia gaming óptima en 4K, con calidad de gráficos Ultra, por ejemplo.
La conexión de red es de fibra, con 1 Gbps de velocidad máxima, con conectividad de red WiFi 5. No llegamos a WiFi 6 tan siquiera. Tenemos una latencia medida en SpeedTest de 16 ms y una tasa de transferencia de 317 Mbps para bajada y 314 Mbps para subida. Con esta conexión de red, GeForce NOW considera que estamos en disposición de disfrutar de GeForce NOW Ultimate sin problemas.
En nuestras pruebas, hemos elegido como títulos para evaluar la experiencia gaming a Starfield de PC Game Pass. También hemos usado FarCry 6, WatchDogs Legion, Gears 5, FarCry 5 y Quake II. Son títulos con requerimientos gráficos que van desde los muy altos a los muy básicos (Quake II).
El tiempo que tardamos en empezar a jugar desde que elegimos el juego en el menú de GeForce NOW es muy comedido. Comparable al que transcurre en un equipo PC. Algo superior si tenemos un equipo con un almacenamiento especialmente rápido, pero más que aceptable. En el caso de Game Pass, tenemos que pasar por la autenticación con nuestra cuenta de Xbox en cada inicio de juego. En otras plataformas, podemos configurar nuestra cuenta en las opciones generales.

Foto: en Watch Dogs Legion, para obtener tasas de frames por encima de 60 fps, tenemos que sacrificar un poco de calidad en efectos RTX. Con algunos parámetros de calidad RTX al máximo, no superamos los 60 fps de media, pero rebajando las exigencias un poco, conseguimos tasas de frames fluidas sin problemas a máxima resolución.
Después, la descripción de la experiencia es bastante sencilla: prácticamente no notamos la diferencia frente a un PC hardware en nuestra casa, o frente a una consola. Tan solo en algunos momentos puntuales experimentamos alguna ralentización asociada a una caída puntual de la velocidad de la conexión. Con una conexión con un cable Ethernet, estos incidentes serán aún menos importantes. Para que te hagas una idea, Gears 5, que es un juego al que dedicamos bastantes horas, nos ha dejado el mejor sabor de boca hasta la fecha en cuanto a velocidad de respuesta en lo que a aspectos tan críticos como a apuntar y acertar se refiere. La experiencia es mucho mejor que desde Xbox Game Pass Ultimate, incluso. Y además, podemos elegir una configuración 4K con tasas de frames sostenidas alrededor de los 120fps máximos de los que disponemos. No tenemos efectos RTX, eso sí. Pero, sin duda, estamos ante la mejor experiencia gaming hasta la fecha, incluyendo la instalación local en algunos portátiles gaming de gama alta.
Títulos como WatchDogs Legion los hemos evaluado desde la perspectiva de benchmarks de rendimiento más que desde la de gaming de la vida real. Con todo “a tope”, tenemos tasas de frames medias alrededor de los 60 fps. RTX, con todo en Ultra o en valores máximos, pasa factura incluso a la RTX 4080. Pero recuerda que estamos hablando de resolución 4K. FarCry 6 también lo hemos evaluado desde la perspectiva de benchmarks de rendimiento usando la herramienta integrada en el propio juego. Los resultados son también sumamente satisfactorios.

Foto: en juegos como Starfield no tenemos herramienta de benchmarking, pero las estadísticas en tiempo real (Ctrl + N o Cmd + N) permiten ver que las tasas de frames son elevadas. En algunas partes del juego, con la calidad en modo Ultra y todo “a tope”, encontramos tasas de frames por debajo de 60 fps en algunos momentos. Rebajando un poco las exigencias de calidad gráfica se recuperan tasas de frames de máxima fluidez.
En Starfield, a 4K y calidad máxima de gráficos, la experiencia gaming es fluida y satisfactoria, permitiendo que los combates se lleven a cabo sin experimentar problemas de precisión. Rebajando un poco los parámetros de calidad, la experiencia es perfecta. Tan solo nos encontramos con algunos momentos en los que la conexión de red se ralentiza brevemente. Con una conexión cableada, estos episodios se reducen de forma sustancial.
La experiencia gaming, en resumidas cuentas, es óptima para jugar con los títulos del catálogo de GeForce NOW a resolución de hasta 4K y hasta 120 fps con una calidad gráfica muy alta o ultra de un modo prácticamente idéntico a como jugaríamos con un PC de gama premium.