Aunque ser el smartphone más fino del mundo es un título que no para de cambiar de ganador, cada día se hace más difícil concretar el mínimo grosor posible.
Sin embargo Kazam lo ha conseguido, y ha llevado a cabo el Kazam Tornado 348, que con un grosor de 5,15 milímetros, se confirma como el más delgado del mundo. El resto de prestaciones lo conforman una pantalla SuperAMOLED de 4,8 pulgadas y resolución 720p, un procesador Mediatek MT6592 de 8 núcleos y 1 GB de RAM.
Kazam asegura que el terminal goza de 240 horas de autonomía en "standby", aunque las baterías precisamente suelen ser el gran pecado y el perjudicado de estos terminales extremadamente finos.
