Corsair acaba de anunciar su caja más voluminosa y mejor equipada de la historia de la compañía: la Obsidian 1000D. Esta caja es el resultado de unos dos años de desarrollo y diseño con el único fin de crear una caja super torre de referencia. Las líneas externas son limpias y con materiales como el aluminio y cuatro paneles de cristal templado. Estos elementos confieren una estética única y una calidad de construcción excelente, a la medida de las exigencias de los usuarios más entusiastas.
Se pueden instalar en su interior, y simultáneamente, un sistema E-ATX y otro Mini-ITX, con 13 puntos de montaje para ventiladores y con hasta dos fuentes de alimentación (SFX y ATX). Caben hasta 11 unidades de almacenamiento, y su finalidad es la de alojar configuraciones con rendimientos externos preferiblemente. Los sistema de enrutado de cables están especialmente cuidados, precisamente para que la instalación de los sistemas no origine líos con las conexiones.
La refrigeración puede estar a cargo de diferentes sistemas de ventilación. Hay ocho montajes para ventiladores de 120 mm en el frontal, tres puntos de montaje de 140 mm. en la parte superior, y dos puntos de montaje para ventiladores de 120/140mm en la parte superior. Por supùesto, hay espacio para instalar equipos de refrigeración líquida tan grandes como se desee. El máximo posible es de 18 ventiladores y cuatro radiadores de refrigeración líquida de 480 mm.
La caja integra un controlador Corsair Commander PRO para iluminación RGB y para controlar los ventiladores. DE hecho, la caja lleva iluminación RGB en el frontal. El panel frontal ofrece conexión dual USB 3.1 de tipo C y cuatro puertos USB 3.0. Los filtros delanteros, traseros y superiores son extraíbles para una mejor limpieza. El precio de la caja es de 499€.
