La GeForce GTX 1660 SUPER es una tarjeta gráfica que todavía puede mover juegos en 1080p. Gracias a su arquitectura Turing, que comparte muchos elementos de las GeForce RTX 20, aunque no dispone de hardware dedicado para acelerar IA ni trazado de rayos, se comporta mejor que las GTX 10, pero su ciclo de vida se está agotando.
¿Valdría la pena cambiar la GeForce GTX 1660 SUPER por una GeForce RTX 5060? Esta pregunta la contesta NJ Tech con un vídeo donde hacen una comparativa de rendimiento entre ambas en juegos actuales.
La GeForce RTX 5060 tiene 3.840 shaders, 120 TMUs, 48 ROPs, 120 núcleos tensor, 30 núcleos RT, bus de 128 bits y 8 GB de GDDR7. La GeForce GTX 1660 SUPER tiene 1.408 shaders, 88 TMUs, 48 ROPs, bus de 192 bits y cuenta con 6 GB de GDDR6 a 14 Gbps.
Echoes of the End Enhanced Edition rinde a 58 FPS en la RTX 5060 en 1080p y calidad alta, y a 24 FPS en la GTX 1660 SUPER. The Outer Worlds 2 también va mucho mejor en la primera, donde funciona a una media de 80 FPS en calidad alta y 1080p, mientras que la 1660 SUPER lo mueve a 27 FPS.
Silent Hill f corre a 78 FPS en 1080p y calidad equilibrada en la RTX 5060, y a 33 FPS en la 1660 SUPER. La diferencia también es muy grande en otros juegos, como Dying Light: The Beast, que va a 78 FPS en la 5060 y a 33 FPS en la 1660 SUPER.
De media, la GeForce RTX 5060 ofrece más del doble del rendimiento que la GeForce GTX 1660 SUPER, y en algunos juegos llega casi a triplicarla, así que sí será un buen cambio pasar de la GeForce GTX 1660 SUPER a una GeForce RTX 5060.