Nintendo es una de las empresas que más protege sus juegos, y su propiedad intelectual. No es la única empresa que hace esto, y es normal que quiera proteger lo que es suyo frente a abusos y violaciones de terceros, pero el problema que tiene la compañía japonesa es que a veces es tan estricta que acaba quedando en ridículo.
Una de sus últimas batallas legales contra Palworld ha dado mucho de lo que hablar. Nintendo quiso utilizar una patente de "captura de monstruos", un concepto que la compañía creía haber inventado cuando la solicitó en 2024, pero que al final ha sido rechazada porque el examinador de la patente determinó que no era original, y que ya había sido utilizada en juegos anteriores, como ARK: Survival Evolved y Monster Hunter 4.
Este rechazo no es definitivo, Nintendo todavía puede presentar una réplica bien argumentada para intentar darle la vuelta a esa decisión, pero no lo tiene nada fácil, porque está demostrado que no es una patente original, y que no puede apropiarse de una idea que ya ha sido utilizada en juegos anteriores, y que coincide totalmente con lo que describen en el texto de esa solicitud de patente.
Nintendo no es la única que ha intentado patentar cosas absurdas o tan genéricas que afectaban a la vida normal de las personas. Normalmente, las patentes contrarias al orden público, la moral o las buenas costumbres deben ser rechazadas, y también aquellas que carezcan de originalidad o de aplicación o utilidad industria.
En el caso de Nintendo contra Palworld se nota que hay un cierto rencor por parte de la primera, que considera que este juego es una copia de Pokemon, y que es un robo demasiado descarado de su propiedad intelectual. Una cosa es lo que piense Nintendo, y otra es lo que sea capaz de demostrar en los tribunales, que es lo que importa.
