El pantallazo azul de la muerte es uno de los elementos que siempre ha estado presente en Windows. Desde el nacimiento del sistema operativo este pantallazo ha estado dando disgustos y también información sobre los problemas que hacían que un equipo sufriera un fallo tan crítico que no tenía más remedio que bloquearse, y reiniciarse.
La presentación del pantallazo ha ido cambiando con el paso de los años. No siempre ha sido igual, pero siempre se ha mantenido una cosa en común, el color azul del fondo. Con Windows 10 se introdujo además la cara triste, y también el código QR, que se puede escanear con la cámara de un dispositivo móvil para conseguir más información.
Los códigos de error eran útiles en caso de que contactáramos con el soporte de Microsoft, pero al usuario medio no le servían para nada.
Esos pantallazos azules también han dado mala fama a Windows, y por eso Microsoft quiere librarse de ellos, aunque la realidad es que nunca lo va a conseguir, porque por mucho que cambie el color o su diseño estos pantallazos seguirán haciendo el mismo papel, y tendrán el mismo significado.
El pantallazo negro de la muerte que se filtró en abril de este año se va a convertir en una realidad en Windows 11 24H2 a partir de finales de este verano, y sustituirá al pantallazo azul. Según Microsoft este nuevo pantallazo es parte de un cambio con el que busca agilizar la recuperación del sistema, reduciendo el tiempo de recuperación desde que se produce el bloqueo del equipo a solo dos segundos.
Parece que solo será esa versión de Windows 11 la que recibirá este nuevo pantallazo, y que no traerá solo cambios en el diseño, sino que también mejorará su funcionamiento y hará que el PC se recupere más rápido de los fallos críticos.
