Dune Awakening es un juego de rol de acción en tercera persona con un desarrollo de tipo mundo abierto que utiliza el Unreal Engine 5. Es un juego muy exigente, y para jugarlo al máximo sin problemas de rendimiento es necesario contar con un PC potente.
Ya vimos una prueba de rendimiento con diferentes tarjetas gráficas, pero en esta otra comparativa que ha publicado Hardware Times ponen a prueba el rendimiento con otros modelos, y también analizan la dependencia de la CPU y el consumo de memoria gráfica del juego.
Con una GeForce RTX 4060 de portátil, sin reescalado ni generación de fotogramas, Dune Awakening funciona a 35 FPS de media en calidad máxima, y tiene caídas a 26 FPS. Una GeForce RTX 4070 consigue 68 FPS con esa misma configuración, y la GeForce RTX 4090 llega a los 94 FPS. La diferencia entre esta y la GeForce RTX 4080 es mínima, así que hay cuello de botella.
En 1440p la diferencia entre la GeForce RTX 4090 y la GeForce RTX 4080 se agranda. La primera consigue 84 FPS y la segunda 72 FPS. La GeForce RTX 4070 baja a 52 FPS, sin DLSS ni generación de fotogramas. En 4K la GeForce RTX 4070 consigue 30 FPS con calidad máxima, y la GeForce RTX 4090 queda en 51 FPS.
Dune Awakening no consume mucha memoria gráfica. En 4K solo llega a un pico de 10 GB, y en 1080p se mantiene dentro de los 8 GB de memoria gráfica. En 1440p sube un poco a 8,5 GB, dependiendo de la configuración de calidad gráfica utilizada.
El juego no tiene una gran dependencia de la CPU siempre que utilicemos un procesador potente y no muy antiguo. La diferencia entre utilizar un Core i9-12900K y un Core i7-14700K es de solo un 10% en 1080p, y de un 7% en 1440p. En 4K la diferencia es casi nula.
