La plataforma RTX Remix de NVIDIA permite actualizar juegos clásicos modificando algunos assets e introduciendo trazado de trayectorias y soporte de NVIDIA DLSS. Left 4 Dead 2 ha pasado por esta plataforma, y gracias al trazado de trayectorias su calidad gráfica ha mejorado mucho, pero su nivel de exigencia también.
Sin trazado de trayectorias Left 4 Dead 2 funciona a más de 500 FPS en una GeForce RTX 5080 con resolución 4K. Con trazado de trayectorias activado el rendimiento se reduce casi en un 1.200%, y cae a entre 40 y 60 FPS en diferentes zonas donde no hay acción ni combates en curso.
Con trazado de trayectorias en la zona de las caravanas y DLSS 4 en modo rendimiento la media llega a caer por debajo de los 40 FPS, y jugar a este juego a 35 FPS no es agradable, porque la acción es muy rápida e intensa. Con generación de fotogramas el rendimiento mejora y en zonas exteriores, donde el rendimiento caía por debajo de los 40 FPS, ahora es posible mantenerse entre los 50 y los 60 FPS.
En interiores el rendimiento mejora, pero depende de la iluminación y de lo que ocurra en la pantalla. Con resolución 1440p y DLSS 4 en modo calidad el rendimiento en exteriores se mantiene por encima de los 50 FPS, y en interiores por encima de los 60 o 70 FPS, según la zona.
Si se activa generación de fotogramas con DLSS 4 en modo calidad en exteriores el rendimiento mejora mucho y pasa a estar entre los 80 y los 100 FPS en 1440p, aunque exteriores hay caídas por debajo de los 80 FPS.
Pasar de casi 600 FPS a 50 FPS al activar esta tecnología en un juego basado en DirectX 9 tan antiguo con una GeForce RTX 5080 deja una cosa clara, que no estamos preparados de verdad para el trazado de trayectorias.