Las GeForce RTX 50 soportan operaciones FP4 y traen tecnologías exclusivas que no están presentes en generaciones anteriores, como la generación múltiple de fotogramas, pero también tienen un cambio que afecta negativamente a los amantes de los juegos retro, porque ya no soportan PhysX acelerado por GPU en juegos de 32 bits.
Esto quiere decir que todas las tarjetas gráficas de la generación GeForce RTX 50 no pueden utilizar la aceleración por GPU de PhysX en juegos como Cryostasis, Batman: Arkham City, Borderlands 2, GRAW 2, Mirror’s Edge, Assassin’s Creed IV: Black Flag y Bioshock Infinite.
Todos esos juegos funcionarán con PhysX en modo CPU, que es lo mismo que AMD había estado ofreciendo con sus tarjetas gráficas Radeon en aquella época. Esos juegos eran muy exigentes en su momento, y la activación de PhysX aumentaba mucho el consumo de recursos y reducía el rendimiento, pero la mejora en los efectos de las físicas mejoraba la calidad gráfica y la experiencia de juego.
La diferencia entre contar con soporte de aceleración por GPU y carecer de ese soporte es muy grande. DSOGaming lo ha probado utilizando la demo de Cryostasis, y ha comparado el resultado obtenido con una GeForce RTX 4090 y una GeForce RTX 5090. La primera soporta PhysX acelerado por GPU, y consigue unos 100 FPS, mientras que la segunda solo llega a los 13 FPS. En ambos casos la demo se ejecutó en 4K con calidad máxima.
Es una pena que pasen estas cosas, porque precisamente una de las grandes virtudes de jugar en PC es la retrocompatibilidad con los juegos disponibles, y al eliminar la aceleración por GPU de PhysX en las GeForce RTX 50 se reduce tanto el rendimiento que hay juegos que directamente no se pueden jugar de forma aceptable en la tarjeta gráfica más avanzada y potente de esta generación.