Windows 11 es un "problema" para millones de usuarios de PCs perfectamente funcionales. Este sistema operativo tiene unos requisitos elevados, y la compañía ha confirmado que no tiene pensado reducirlos. Esta respuesta se hizo necesaria después de que surgieran rumores y malas interpretaciones de informaciones que decían lo contrario, y que incluso aseguraban que ya no se iba a exigir el chip TPM 2.0.
Si un PC no cumple con los requisitos de Windows 11 este no se puede instalar de forma oficial. Es necesario recurrir a aplicaciones de terceros o a trucos que permitan solventar el bloqueo que se impone para que no se pueda instalar este sistema operativo en un PC que no cumple con todos los requisitos.
La propia Microsoft, en un esfuerzo aparente por incentivar el cambio de los usuarios de Windows 10 a Windows 11, ofrecía en su web oficial una guía donde explicaba cómo se podía superar el bloqueo si nuestro PC no cumplía con esos requisitos mínimos.
Esa guía ha desaparecido, y lo ha hecho coincidiendo con el lanzamiento de la actualización Windows 11 24H2, una de las más problemáticas (sino la que más) de todas las actualizaciones que ha lanzado la compañía hasta la fecha. Microsoft recomienda directamente comprar un nuevo PC si el tuyo no cumple con los requisitos de Windows 11, pero todavía es posible superar el bloqueo de los requisitos en PCs no compatibles.
La herramienta más utilizada, por lo fácil y segura que resulta, es Rufus. Instalar Windows 11 en un PC no compatible puede dar problemas, y su futuro soporte en este tipo de equipos es incierto, pero con Windows 10 en su fase final de soporte puede que esta acabe siendo la salida de muchos PCs que se verán afectados por el final de Windows 10.
