Los ensambladores advierten de que NVIDIA ha hecho que sea imposible vender las GeForce RTX 50 a sus precios recomendados, porque los costes son muy altos y esto hace que los márgenes queden tan ajustados que no será posible comercializar estas tarjetas gráficas a los precios mínimos recomendados.
No se trata de un problema derivado por una escasez de chips o de otros componentes, según las fuentes que están dando información sobre este tema todo se debe a unos márgenes muy ajustados por parte de NVIDIA, lo que estaría forzando a las ensambladoras a subir el precio de sus tarjetas gráficas, incluso de los modelos más económicos.
Esta vez la situación habría sido peor incluso que cuando se lanzaron las GeForce RTX 30, una generación de tarjetas gráficas que se vio afectada por un importante sobreprecio no solo por esos márgenes ajustados, sino también por la realidad de aquel momento (criptominado y la pandemia del COVID).
Parte de este encarecimiento, y de la reducción de los márgenes, se atribuye al uso de memoria GDDR7, según la fuente. Los ensambladores pueden comprar memoria GDDR7 de forma independiente, pero en estos casos los precios no son buenos, y por eso supuestamente dependen de NVIDIA para comprar packs de GPUs y memoria a precios más atractivos, que luego montan en sus PCBs y añaden los sistemas de refrigeración y de iluminación que estiman oportunos.
Parece que los precios de las GeForce RTX 50 van a ser más altos de los mínimos que dio NVIDIA, incluso en los modelos más económicos de los ensambladores más conocidos, y que esto afectará a todas las tarjetas gráficas de esta serie, incluida la GeForce RTX 5060.
