Samsung está teniendo problemas con sus nodos más avanzados de fabricación de semiconductores, y esto está afectando a la producción de sus SoCs Exynos, lo que le está impidiendo utilizarlos en sus smartphones como alternativa a los Snapdragon de Qualcomm.
Los problemas más graves están afectando al nodo de 3 nm GAA, y están perfectamente documentados. La compañía esperaba alcanzar una tasa de éxito por oblea del 70% con ese nodo, pero parece que la compañía solo ha conseguido llegar a una tasa de éxito del 20%, lo que hace que ese nodo no sea viable en el estado en el que se encuentra ahora mismo.
A TSMC las cosas sí le han salido bien. La compañía ha conseguido una tasa de éxito del 60% con su nodo de 2 nm, que todavía se encuentra en fase de producción de prueba, así que podría mejorar esos resultados cuando entre en su fase de producción definitiva.
Para salir del atolladero en el que se encuentra, Samsung pidió a TSMC que fabricase su SoC Exynos de última generación, el modelo que iba a utilizar en los Galaxy S25, pero según nuevos rumores la compañía taiwanesa decidió rechazar la propuesta de Samsung. No hubo acuerdo, y por tanto no habrá un SoC Exynos de nueva generación fabricado por TSMC, al menos de momento.
Con los problemas que está teniendo Samsung con su nodo de 3 nm no parece muy probable que vaya a utilizarlo para fabricar un nuevo SoC Exynos, y esto refuerza los rumores que decían que los solo estarán configurados con el Snapdragon 8 Elite. Viendo lo malos que han salido los Exynos de las últimas generaciones esta es una buena noticia, porque en Europa nos habría tocado "comernos" los modelos con SoC Exynos.
