Ya han aparecido las primeras pruebas de rendimiento utilizando Intel Arrow Lake-S con las últimas actualizaciones y con el microcódigo 0x114. Según Intel estas actualizaciones, junto a una configuración adecuada en la BIOS, ayudan a mejorar el rendimiento de estos procesadores en juegos.
TechPowerUp ha compartido nuevas pruebas de rendimiento utilizando un Intel Core Ultra 9 285K con esas actualizaciones y una GeForce RTX 4090. También han utilizado varias aplicaciones para descubrir si hay una ganancia de rendimiento en estas, y no solo en juegos.
Con aplicaciones la mayor ganancia se consigue con el Antivirus Avast, cuyo rendimiento mejora aproximadamente en un 20%. En el resto de aplicaciones utilizadas las diferencias no son significativas, y se pueden atribuir incluso a pequeñas oscilaciones del sistema.
En juegos, que es donde los Intel Core Ultra 200K tienen un problema de verdad, el rendimiento no experimenta ninguna mejora importante al pasar del microcódigo 0x113 al 0x114 en un sistema con Windows 11 24H2 actualizado a diciembre. En la mayoría de los juegos se aprecian diferentes de entre 1 y 5 FPS, con la única excepción de Elden Ring, que puede mejorar hasta 21 FPS.
La conclusión que sacan en TechPowerUp es que no hay una mejora significativa en general, y que sorprende que en algunos juegos incluso el Intel Core i5-14600K rinda mejor que el Intel Core Ultra 9 285K. En las pruebas no sale bien parado, aunque hay algún resultado que sorprende, como la diferencia que hay en Alan Wake 2, un juego que no suele mostrar dependencia de la CPU ni siquiera en 1080p.
Estos resultados están muy lejos de lo que prometía Intel, y hacen pensar que el rendimiento de Arrow Lake-S en juegos podría no tener realmente ninguna solución. Quizá con futuras actualizaciones la cosa cambie.
