No todos los desarrolladores tienen el mismo entusiasmo por PS5 Pro. Algunos creen que es una mejora inferior si se compara con el cambio que supuso PS4 Pro frente a PS4, y Digital Foundry ha confirmado que el procesador Zen 2 es una de sus grandes limitaciones, como lo fue la CPU Jaguar en PS4 Pro.
La consola PS5 Pro tiene un procesador Zen 2 que es idéntico al de PS5, solo se diferencia de este porque puede llegar a los 3,85 GHz, pero esa velocidad no es la que se mantiene normalmente, y hay que "forzarla" para activarla. En Cyberpunk 2077, utilizando una zona cargada de NPCs para forzar todavía más el impacto de la CPU en el juego, con el modo rendimiento activado la consola no puede mantener 60 FPS estables.
En Baldur´s Gate 3 la cosa es aún peor, porque en una de las zonas más exigentes de este juego PS5 Pro baja de los 40 FPS en modo rendimiento. Es culpa del procesador, que no es lo bastante potente para conseguir esos 60 FPS estables. En juegos donde el peso de la CPU es menor la consola no debería tener estos problemas para ser capaz de mantener 60 FPS.
Comparando con PS5 la mejora de rendimiento oscila y puede llegar a ser de hasta un 19% dependiendo de cada zona y de cada juego. En Cyberpunk 2077 es donde tiene un mayor impacto, en Baldur´s Gate 3 la diferencia es más pequeña.
PS6, la próxima consola de Sony, utilizará una CPU basada en una arquitectura nueva y será más potente que el procesador de PS5 y PS5 Pro, aunque todavía se desconoce cuál podría ser la arquitectura elegida por Sony. La aproximación en esa nueva consola debería ser la misma que en PS5, así que la GPU volverá a tener prioridad y se le dará mayor espacio potencia.