Call of Duty: Black Ops 6 no va a ser ninguna revolución técnica. Es otro juego más de la franquicia desarrollado como título de transición entre generaciones que va a llegar a la vieja generación de consolas y a la generación actual, por eso sus requisitos son tan bajos, porque no es exclusivo de la generación actual.
El juego se lanza justo hoy, 25 de octubre, y las primeras pruebas de rendimiento han dejado algunas opiniones negativas que afectan sobre todo al uso del reescalado. Este juego es compatible con NVIDIA DLS, AMD FSR y con Intel XeSS, las tres tecnologías de reescalado más importantes que se utilizan en juegos, pero ha debido haber algún problema con la implementación de estas tecnologías, porque según algunos jugadores "están rotas".
En Reddit han aparecido pruebas de rendimiento que respaldan estas valoraciones negativas. Un usuario dice que al activar cualquiera de esas tecnologías se produce una pérdida de rendimiento, cuando lo que debería ocurrir es todo lo contrario, una ganancia de rendimiento que dependerá de muchas cosas, como la resolución utilizada, la configuración gráfica y el resto de componentes del equipo.
En el mejor de los casos parece que NVIDIA DLSS puede mejorar el rendimiento en un 10%, pero otros usuarios dicen que están notando problemas de fluidez que hacen que aunque el juego funcione a 100 FPS o más en realidad dé la sensación de ir a 30 FPS. Otros usuarios se han sumado y han dicho que tienen problemas de rendimiento importantes con el juego en PC. No tardarán mucho en aparecer comparativas completas de rendimiento en medios profesionales, ahí se podrá ver si realmente este juego tiene o no estos problemas tan graves.