El 11 de octubre de 1999 fue el día en el que NVIDIA puso a disposición de los usuarios de PC, la primera GPU del mundo, la NVIDIA GeForce 256. Esta tarjeta gráfica introducía el concepto de Transform & Lightning mediante hardware, descargando a la CPU de las tareas relacionadas con los gráficos.
Foto de la GeForce 256, sacada de Wikipedia.
En aquella época llegaron juegos que aún hoy siguen siendo vigentes, como Unreal Tournament o Quake III Arena. El año 1999 fue el año de Matrix, mientras se esperaban por la llegada del efecto 2000. La plataforma de música más popular era Napster y todavía pagábamos con pesetas.
Aquella tarjeta gráfica de hace 25 años sentó las bases de una familia de GPUs, las NVIDIA GeForce, que ha perdurado hasta nuestros días, con un éxito sin precedentes tanto en el mercado de consumo como en el de los centros de datos. La arquitectura de las tarjetas gráficas de NVIDIA tuvo otro punto de inflexión con la introducción de CUDA en junio de 2007 para aprovechar el paralelismo implícito en la arquitectura de las GPUS en tareas científicas, simulación o GPGPU en general.
Otro hito importante en la historia del gaming aconteció con la llegada de los eSports. Los juegos en red local, que dieron lugar a fenómenos de masas como las Campus Parties, dejaron paso a la instalación de los servidores en la nube, alojando a miles de jugadores compitiendo entre sí en títulos como League of Legends o DotA 2, sin olvidar a Fortnite. Los streamers de videojuegos, a su vez, evolucionaron hacia el fenómeno de los influencers, diversificando el contenido compartido online para ir más allá de las partidas de videojuegos comentadas.
Actualmente, la tendencia más fuerte en tecnología de computación es la IA, donde NVIDIA ha conseguido posicionarse como proveedor número uno mundial e indiscutible del hardware para entrenamiento e inferencia, gracias a la herencia de CUDA especialmente.
Lejos están los días en los que se rumoreaba que Intel iba a comprar NVIDIA allá por 2006. En la actualidad, se calcula que Jensen Huang, CEO de NVIDIA, podría comprar a Intel (con un valor de mercado de unos 97.000 millones de dólares) con su patrimonio calculado en 109.000 millones de dólares.
Durante estos 25 años también asistimos a la compra de ATI por parte de AMD, consiguiendo posicionar a la compañía muy bien para competir con Intel. De hecho, de no ser por las APUs, con tecnología de gráficos integrados Radeon, puede que AMD no estuviera entre nosotros como compañía independiente y solvente.
También asistimos al boom de las criptomonedas, que puso en jaque al mercado de las tarjetas gráficas, provocando subidas de precios estratosféricas y escasez de chips.
En cualquier caso, las gráficas GeForce de NVIDIA han sido testigos de excepción de la historia reciente del PC y de los centros de datos. Y todo empezó con la GeFroce 256.
NVIDIA ha publicado un post en plan "revival" en su blog, en cuya temática nos hemos inspirado también para hacer un peculiar recorrido por estos 25 años de historia. Además, NVIDIA va a celebrar este hito con la comunidad de PC gaming, haciendo una competición de PCs retro sleepers de 1999, con la GeForce RTX 4080 SUPER como protagonista.