God of War Ragnarök no es un juego excesivamente exigente. Incluso con una GeForce RTX 3050 de 8 GB es posible jugarlo en 1440p, como confirmaba una comparativa de rendimiento reciente en PC, ¿pero es posible jugarlo en una consola portátil con una GPU integrada?
La ASUS ROG Ally puede mover God of War Ragnarök en calidad baja con resolución de 1.280 x 720 píxeles a una media de 39,8 FPS utilizando el modo de 25 vatios. Con el modo de 15 vatios el rendimiento baja a 27,7 FPS, que es casi el mismo nivel de rendimiento que tiene el juego en la Steam Deck con resolución de 1.280 x 800 píxeles.
La tasa mínima de FPS se mantiene por encima de los 30 en la ASUS ROG Ally, pero hay una gran diferencia al activar el modo de 15 vatios. En la Steam Deck baja a 21,3 FPS.
Activar el modo de calidad media es algo que no resulta viable en la Steam Deck, porque tiene un impacto de 10 FPS, y hace que el rendimiento baje de 27,5 FPS a 17,1 FPS. Con esa media ya es totalmente injugable.
La ASUS ROG Ally puede mantener 25,5 FPS en calidad media con resolución 720p, y 27,3 FPS en 1080p con calidad baja.
Los ajustes óptimos para jugar en la Steam Deck con una media de entre 25 y 30 FPS según la zona del juego son FSR activado en equilibrado y todo en calidad baja, menos las texturas y el filtrado anisotrópico, que se pueden subir a medio o alto.
En la ASUS ROG Ally el rendimiento puede variar mucho en función de la zona, así que para conseguir un rendimiento estable con 30 FPS en cualquier situación se recomienda jugar con FSR en modo calidad y una combinación de ajustes con calidad baja y media, y texturas en alto.