Nintendo Switch 2 va a utilizar un SoC NVIDIA Tegra personalizado, pero según el canal Moore's Law is Dead AMD intentó pujar para quitarle el puesto y colocar un chip con CPU Ryzen y GPU Radeon en esa consola. Al final no lo consiguió, y no fue porque no hubiera lanzado una buena oferta a Nintendo, fue por razones técnicas y de rendimiento.
Moore's Law is Dead dice que Nintendo eligió la solución que le ofrecía NVIDIA por dos razones principales. La primera razón era la retrocompatibilidad. A Nintendo le preocupaba el trabajo adicional y las posibles complicaciones de retrocompatibilidad con la Nintendo Switch original que podría haber tenido que afrontar si cambiaba la CPU y la GPU con Nintendo Switch 2.
Pasar de una CPU ARM y una GPU NVIDIA a una CPU x64 y una GPU Radeon podría haberle dado más de una complicación a efectos de retrocompatibilidad, eso es verdad.
La segunda razón por la que Nintendo eligió a NVIDIA fue por el rendimiento que su SoC ofrecía trabajando en el modo de 5 vatios. Según la fuente el modo de 5 vatios será el que utilizará Nintendo Switch 2 por defecto en modo portátil, porque la compañía japonesa quiere que esta nueva consola ofrezca una alta autonomía y que también sea ligera y delgada. Para conseguirlo va a utilizar una batería de 20 Wh, y por eso necesita un chip que pueda rendir bien con un consumo de solo 5 vatios.
El SoC de NVIDIA rendía mejor en el modo de 5 vatios, y por eso Nintendo acabó prefiriendo la solución que le ofrecía esta empresa. Un consumo tan bajo obligará a bajar mucho las velocidades de trabajo tanto de la CPU como de la GPU de Nintendo Switch 2, y esto afectará a su rendimiento, pero será mucho más potente que Nintendo Switch, y en modo dock no tendrá esas limitaciones de consumo. Su posible rendimiento podría acabar siendo inferior al de una GeForce RTX 2050 Mobile con las frecuencias muy reducidas.