PalWorld se convirtió en un fenómeno de ventas. Su éxito fue arrollador, pero su gran parecido con la franquicia Pokémon sembró la duda sobre posibles acciones legales por parte de Nintendo. La compañía japonesa decidió no hacer nada, y dejó que PalWorld arrasara en ventas mientras que se limitaba a decir que, si lo consideraban necesario, tomarían medidas.
El tiempo fue pasando, y como Nintendo se mantuvo en la sombra parecía que la compañía japonesa al final había aceptado a PalWorld, y que no iba a tomar ningún tipo de medida contra su desarrolladora, PocketPair. Estábamos muy equivocados, porque al final ha decidido interponer una demanda porque cree que su juego, PalWorld, infringe varias de sus patentes, y busca una indemnización por daños y perjuicios.
Nintendo ha dicho que seguirá tomando las acciones que sean necesarias para proteger su propiedad intelectual y sus derechos, algo que llevan haciendo desde hace ya muchos años. La compañía siempre ha perseguido y ha hecho frente en los tribunales a cualquiera que se atreviera a vulnerar su propiedad intelectual, ni siquiera los emuladores han sido una excepción.
El parecido entre PalWorld y Pokémon es indiscutible, pero será un juez el que tendrá que determinar si es lo bastante grande como para considerar que PocketPair ha violado los derechos de propiedad intelectual de Nintendo. Puede que Nintendo se centre en el parecido de algunos personajes del juego con ciertos Pokémon, porque hay diferencias de jugabilidad que alejan a PalWorld por completo de esa franquicia, como el uso de armas de fuego, algo impensable en la saga de Nintendo. Menos mal que a From Software no le ha dado por demandar a todo el que ha intentado lanzar un clon de Dark Souls.
