Los problemas de estabilidad que han tenido los procesadores Intel Core Gen 13 y Core Gen 14 han tenido bastante impacto entre los usuarios, y los fabricantes de placas base han dado su opinión sobre este tema de forma anónima para expresar lo que realmente sienten al respecto.
Los fabricantes sienten que si estos problemas de estabilidad no se resuelven de una manera clara y firme la confianza de los consumidores bajará, y creen que esto podría afectar a las ventas de los procesadores Intel Arrow Lake, que serán lanzados a finales de este año. Intel se encuentra en una carrera contrarreloj, porque tiene que terminar de perfilar el lanzamiento de esa nueva generación mientras pule los detalles para resolver los problemas de estabilidad de los Core Gen 13 y Core Gen 14.
Si la confianza en Intel se reduce AMD sería la gran beneficiada, y esto podría dar un gran impulso a las ventas de sus procesadores Ryzen 9000, cuyo lanzamiento está previsto para el mes de julio. Estos tienen otra ventaja, y es que a diferencia de Intel Arrow Lake no van a necesitar un cambio de placa base, aquellos que tengan una placa base AM5 podrán actualizar la BIOS y montar un Ryzen 9000.
En rendimiento parece que los Ryzen 9000 y los Arrow Lake van a estar en un nivel bastante parecido. El Ryzen 9 9950X tendrá 16 núcleos y 32 hilos y mejorará el IPC en un 16% frente al Ryzen 9 7950X, y el Core Ultra 9 285K tendrá 24 núcleos (8 núcleos P y 16 núcleos E) y 24 hilos, si se confirma la eliminación de la tecnología HyperThreading también en esta gama. Su mejora del IPC será del 14% en los núcleos P.
