Durante este pasado Computex 2024 hemos empezado a ver tímidamente la presencia de placas base con slots de memoria totalmente distintos a lo que conocemos hasta ahora, estamos hablando de placas y módulos de memoria que conforman el estándar CAMM2 de la JEDEC, dichas siglas vienen de (Compression Attached Memory Module)

Hace un par de años vimos que DELL proponía un formato exclusivo para sus equipos portátiles llamado CAMM, una idea pensada para reducir el espacio ocupado por los módulos de memoria que permitirá ofrecer más capacidad en un tamaño muy controlado. Parece que la idea gustó y la JEDEC decidió que trabajarían sobre dicho formato para la memoria del futuro, así a finales de 2023 el estándar CAMM2 para todo el mundo tomó forma.
La idea de reducir espacio es sumamente importante para los portátiles y no tanto para sobremesa, es por eso que de momento han pasado bastante desapercibidos, pero los fabricantes no han estado de brazos cruzados y más allá de portátiles y memoria LPDDR5 CAMM2 si miramos con detalle imágenes de los stands de placas base o de fabricantes de memoria en este Computex vemos que casi todos tienen algún modelo expuesto por lo que están allanando el camino para su llegada sin, de momento, presionar a nadie.
Con la memoria CAMM2 se permite memorias de más capacidad y más rápidas a la vez que se ocupa menos espacio. El formato está pensado para permitir distintas capas en un único módulo para así conseguir tanto altas capacidades como configuraciones de alto rendimiento puesto que se permiten configuraciones de doble canal aún con un único módulo de memoria.

Llevamos muchísimos años con los DIMMs de memoria y cualquier cambio puede asustar pero parece que cada vez hay que enfrentarse a más problemas heredados de dicho diseño como es la necesidad de unos conectores muy grandes y que generan interferencias eléctricas que a medida que subimos de Hz obligan a más calidad de todos los elementos, así pues estamos llegando al límite de este formato que si bien siempre ha sido rápido de montar su colocación cerca del procesador siempre ha comportado compromisos en los disipadores de los procesadores y problemas de flujo de aire.
Los módulos CAMM2 se montan de forma horizontal a la placa base de una forma más directa a través de unas conexiones que incorpora la misma, simplemente hay que atornillar los módulos para que no se suelten (veremos si para sobremesa proponen alguna fijación sin necesidad de herramientas) y por lo tanto requieren de mucho menos volumen, tocará ver qué hacen los fabricantes para su disipación pero estéticamente se podrán conseguir soluciones incluso más vistosas que las actuales.
La memoria CAMM2 de momento tiene mucho sentido en portátiles o consolas portátiles como la XPG NIA y es ahí donde veremos una rápida adopción, luego llegarán los miniPCs para más adelante ir seduciendo al usuario de equipos de sobremesa, seguramente los diseños mini-ITX serán los primeros en demostrar su valía.

Si bien ya hay placas base que se han mostrado en este Computex 2024 compatibles con memoria DDR5 en formato CAMM2, como la de arriba, lo que no queda claro es para cuándo veremos su desembarco a nivel comercial en equipos de sobremesa, creemos que durante un tiempo será una memoria de nicho, inicialmente más cara y con pocas ventajas de cara al consumidor pero que irá allanando el camino para que los módulos de memoria tal y como los conocemos empiecen a desaparecer. Placas base sin conectores a la vista y de gama alta parece que serán las primeras en introducir DDR5 CAMM2. De momento parece que Kingston es quien está haciendo más ruido en este sentido.
Cuando se filtró la fecha para los procesadores Intel Arrow Lake-S se comentó que tendría soporte para memoria CAMM2, así que si bien debemos tener claro que podremos montar este nuevo tipo de memorias en procesadores ya existentes o que llegarán este mismo año, el hecho de ya contar con un amplio abanico de módulos de memoria DDR5 nos hace pensar que la industria y los fabricantes estarán preparándose para que su uso sea masivo en el momento que estrenemos la próxima generación de memorias DDR6, de hecho ya se han anunciado velocidades de DDR6 a 17,6 Gbps y LPDDR6 a 14,4 Gbps en formato CAMM2.
Veremos si los fabricantes saben introducir este gran cambio de forma que el consumidor lo vea como una ventaja y no una imposición y qué ritmo de adopción se alcanza, este año será simplemente algo anecdótico, 2025 ya habrá más modelos y fabricantes pero suponemos que su adopción será exponencial y, como hemos dicho, con la DDR6 como punto de inflexión.