Un estudio realizado en Corea del Sur confirma que el chipset B650 de AMD es el más popular dentro de la plataforma Am5. Este chipset es tan utilizado que representa el 80,9% del total de placas base de dicha plataforma en ese mercado, superando ampliamente al resto de opciones, e incluso ha ido comiendo terreno al chipset A620, que llegó a tener una cuota del 37,8%.
El chipset menos utilizado es el X670, seguido del B650E y del X670E, que es el tope de gama de AMD, y que tiene una cuota de mercado mayor de lo esperado en relación con los otros chipsets. La gráfica también muestra la evolución de la cuota de mercado de los diferentes chipsets disponibles para la plataforma AM5. El chipset B650 siempre ha sido el más utilizado, y su cuota ha ido creciendo gradualmente a expensas del chipset A620, que ha visto reducida su cuota de forma continuada.
Ese crecimiento en popularidad del chipset B650 puede deberse a que es el más equilibrado en relación coste y prestaciones, y también porque la diferencia de precio que tienen las placas base con dicho chipset no suele ser mucho más alto que el de las placas base con chipset A620. Al final los consumidores prefieren invertir un poco más para comprarse una placa base superior y más completa con chipset B650.
El formato más popular de todos es el micro ATX, que tiene una cuota del 88,7%. El segundo más popular es el ATX, con una cuota del 11,3%. El formato mini ITX tiene una cuota del 0,1%, mínima durante todo el periodo reflejado en esa gráfica. En el mercado internacional el chipset B650 también es el más popular y el más utilizado por su valor en relación coste y prestaciones. Con este tipo de placas base se puede montar cualquier procesador Ryzen 7000 actual y es posible utilizarlos sin problemas, aunque los modelos más económicos pueden alcanzar temperaturas más elevadas en el VRM cuando se monta un Ryzen 9 7950X y este trabaja a plena carga.