El procesador es un componente muy importante para jugar, ¿pero tiene la misma importancia para jugar en 4K? Techspot ha compartido un vídeo donde intenta responder a esa pregunta de una manera consistente y clara, utilizando diferentes configuraciones y resoluciones.
La CPU es importante incluso en 4K, pero esto depende de muchas cosas, esa es la conclusión que se puede sacar del artículo que han publicado. Hay juegos que pueden escalar mejor en procesadores como el Ryzen 7 7800X3D incluso en 4K, pero donde más se sigue notando el impacto del procesador es en 1080p y en 1440p. Esas dos siguen siendo las resoluciones donde más peso tiene ese componente.
También importa la tarjeta gráfica utilizada. Con una Radeon RX 7700 XT tendremos el mismo rendimiento en 4K en juegos como Hogwarts Legacy utilizando un Ryzen 5 3600 o un Ryzen 7 7800X3D, siempre que configuremos el juego en calidad máxima.
Con tarjetas gráficas más potentes la cosa cambia. Ese mismo juego en 4K y con calidad máxima funciona a 92 FPS con un Ryzen 7 7800X3D, y con un Ryzen 5 3600 se mueve a 65 FPS. Los resultados pueden cambiar en función de cada juego en concreto, pero incluso en juegos como Starfield, que sigue sin estar debidamente optimizado, la diferencia que puede marcar el procesador en 4K y calidad máxima es importante, porque con un Ryzen 5 3600 conseguimos 58 FPS y con un Ryzen 7 7800X3D tenemos 76 FPS.
Vale la pena invertir más en el procesador para jugar en 4K siempre y cuando tengamos una tarjeta gráfica a la altura de ese procesador. Por ejemplo, no sería una combinación óptima un Ryzen 7 7800X3D y una GeForce RTX 4060, sería mejor un Ryzen 5 7600 con una Radeon RX 7900 GRE.