Se ha filtrado la primera imagen real del socket LGA-1851. Este socket será el que utilizarán los procesadores Intel Arrow Lake-S para escritorio, la próxima generación de CPUs de alto rendimiento que sucederá a los Intel Raptor Lake Refresh, y que adoptarán el diseño multi "tile" de los Intel Meteor Lake.
A simple vista los cambios frente al socket LGA-1700 son muy difíciles de apreciar, pero ambos son distintos y no habrá compatibilidad entre los procesadores de ambas generaciones. Aunque ambos sockets tienen la misma medida se han incorporado medidas para que los Core Gen 14 y anteriores no puedan encajar en ese socket, ya que esto podría llegar a producir daños si se fuerza el cierre del mecanismo de retención.
El socket LGA-1851 tiene además 151 pines más que el actual, así que eléctricamente también hay una incompatibilidad. Este socket se implementará en las nuevas placas base con chipset serie 800 que va a lanzar Intel también a finales de este año. Lo más probable es que esa serie se divida en un total de cuatro grandes versiones: H810, que será la gama de entrada, es decir, la opción más básica y económica, B860, que será la gama media y una de las soluciones más demandadas, H870, que será una opción equilibrada en precio y prestaciones, y el chipset Z890, que será el tope de gama y el que permitirá hacer overclock a procesadores K.
Todavía no hay información sobre los precios de esas nuevas placas base ni sobre su posible vida útil, pero debería aguantar al menos dos generaciones, Intel Arrow Lake S y su sucesora, que todavía no está nada claro cuál será. Si Intel decide lanzar algún "refresh" puede que el socket LGA-1851 goce de una mayor vida útil.
