La tecnología de escalado para conseguir mayores resoluciones a partir de imágenes y frames procesados a resoluciones inferiores se usa de forma generalizada en juegos. El coste en cuanto a recursos derivado de hacer el procesamiento a resoluciones bajas y luego escalar a resoluciones mayores, es menor que el derivado de hacer el procesamiento a una resolución alta directamente.
Microsoft parece que está pensando en integrar esta tecnología en el propio sistema operativo, de modo que puedan beneficiarse de ellas tanto los juegos como las aplicaciones. En el Windows 11 Insider build 24H2 está ya integrada esta opción. En principio estaría oculta dicha opción, pero ya han encontrado la forma de habilitarla.
Esta opción permite habilitar la opción como "Auto", o elegir aplicaciones individuales que se beneficien de ella. Esta tecnología usaría cores de NPU, así como en los tensor cores de la GPU.
Aún está por ver cómo se beneficiarían las apps de Windows de esta tecnología. Un caso de uso sería el de los reproductores de vídeo. Algunos ya usan las tecnologías RTX Video Super Resolution o FidelityFX Super Resolution, pero a través de parches para las aplicaciones o versiones tuneadas de las mismas.
También tendría utilidad en juegos como los de tipo "retro" o aquellos que no vienen con compatibilidad nativa con esta tecnología. La tecnología está presente en Windows 11 24H2, que llegará más adelante este año.