El Ryzen 5 1600 fue uno de los mejores procesadores que lanzó AMD dentro de la generación Ryzen 1000, basada en la arquitectura Zen. Tenía 6 núcleos y 12 hilos, y contaba con 16 MB de caché L3. Utilizaba un diseño MCM y tenía dos bloques de cuatro núcleos conectados, de los cuales dos estaban inactivos.
Su buena relación precio-rendimiento fue clave en su éxito en el mercado de consumo, y es que por fin pudimos tener un procesador de seis núcleos y doce hilos con un buen IPC a un precio que no resultara prohibitivo, como ocurría con los Intel HEDT de aquella época.
El canal RandomGaminginHD se ha encontrado con un Ryzen 5 1600 único, un modelo que en realidad sería un Ryzen 7 1700, porque tiene 8 núcleos y 16 hilos. En este caso parece que el procesador fue desbloqueado de alguna manera para que los dos núcleos que tenía desactivados volvieran a funcionar.
Esto es algo que ha ocurrido con otros componentes y en otras ocasiones. Recuerdo procesadores Athlon de AMD que tenían núcleos que se podían desbloquear, y también tarjetas gráficas que podían mutar a modelos superiores. Pero en este caso no ha ocurrido nada de esto, el autor del vídeo dice que todo habría sido un error de fábrica, y que este Ryzen 5 1600 salió de casa sin bloquear. Lo mismo ocurrió, supuestamente, con algunos Ryzen 5 1600X.
Imagina la alegría de comprar un Ryzen 5 1600 y llevarte en realidad un Ryzen 7 1700. Los núcleos extra funcionan sin problema, y en juegos como Starfield permiten una mejora importante, puesto que el rendimiento pasa de 32,7 FPS en 1080p con calidad alta utilizando un Ryzen 5 1600 con 6 núcleos y 12 hilos a 40,9 FPS con la configuración de 8 núcleos y 16 hilos.
La mejora no es tan grande en otros juegos como Cyberpunk 2077, pero también existe y es de 3 FPS más. Starfield es el único juego que realmente se beneficia de una manera palpable de esa mejora de rendimiento al contar con dos núcleos y cuatro hilos extra.