Durante muchos meses el precio de las unidades SSD se ha movido en niveles muy bajos, y las ofertas puntuales que fueron apareciendo en diferentes campañas de los principales minoristas no hicieron más que reducir todavía más esos precios. Salieron ofertas muy buenas, y fue posible comprar unidades SSD de 2 TB por entre 90 y 120 euros.
Esta situación va a cambiar. El precio de las unidades SSD va a subir a corto plazo porque ya hay escasez de memoria NAND Flash, y según la fuente afectará sobre todo a las unidades de mayor capacidad, que son las que utilizan más chips de memoria NAND Flash. No se ha concretado nada en números, pero se comenta que la subida de precio se empezará a notar dentro de dos o tres meses, y que las unidades de entre 2 TB y 4 TB de gama alta serán las más afectadas por la subida.
Entre las razones que justifican esa escasez de memoria NAND Flash se citan un aumento de la demanda de unidades SSD por parte de los consumidores, a pesar de que el primer trimestre del año es temporada baja, y a un aumento de los precios de los contratos de suministro, que habrían subido entre un 15% y un 20%. Todo esto es consecuencia de la estrategia de los grandes proveedores de memoria NAND Flash de reducir su producción para minimizar pérdidas y forzar un aumento de precios.
No todos los SSDs van a subir de precio en la misma cuantía ni al mismo tiempo, pero el cambio de tendencia parece inevitable. Si necesitas un SSD no deberías esperar para comprarlo, porque al final te acabará saliendo más caro.
