RandomGaminginHD ha compartido una prueba de rendimiento en la que muestra cómo ha envejecido su PC gaming de gama media de hace 4 años, un equipo que montó con piezas muy asequibles que en su momento ofrecían un buen nivel de rendimiento. ¿Cómo rinden ahora estos componentes, sigue siendo posible jugar con ese equipo o ya se está agotando?
La respuesta que podemos sacar viendo el vídeo es que un poco de cada cosa, porque aguanta bien el tipo con algunos juegos, pero el cambio de generación que estamos viviendo le está pasando factura y está poniendo en evidencia su agotamiento. El PC está formado por un Intel Core i5-8400, un procesador que tiene 6 núcleos y 6 hilos, tiene una GeForce GTX 1070 basada en Pascal que tiene 8 GB de memoria gráfica, cuenta con 16 GB de memoria RAM y utiliza una unidad SSD.
El primer juego que ha probado ha sido Counter Strike 2. En 1080p y con calidad baja registra una media de 231 FPS, así que es perfectamente jugable y disfrutable, porque sus mínimos son de 82 FPS, así que la fluidez es total en cualquier escena. Cyberpunk 2077 en su versión 2.0 funciona a 78 FPS con resolución 1080p, texturas en alto y el resto de ajustes en alto, y tiene mínimos de 45 FPS. Elden Ring se mueve a 59 FPS de media con resolución 1080p y calidad media, y sus mínimos son de 46 FPS, así que se puede jugar perfectamente.
Fortnite en 1080p con calidad baja va a 194 FPS de media, y sus mínimos son de 54 FPS. De nuevo una experiencia fluida. Con juegos más actuales y exigentes que son la verdadera prueba de fuego de este equipo, los resultados ya no son tan buenos. Starfield, que siendo justos hay que decir que está mal optimizado, registra 38 FPS de media y mínimos de 22 con resolución 1080p y calidad baja activando FSR2 al 60%. Alan Wake 2 en 1080p y calidad baja con FSR 2 en ultra rendimiento se mueve a menos de 25 FPS, así que la experiencia tampoco es buena.