Dos días antes de su presentación vimos un unboxing anticipado, y al final casi toda la información que os fuimos dando durante las últimas semanas sobre los Google Pixel 8 y Pixel 8 Pro se ha cumplido.
Google presentó ayer ambos terminales y no hubo ninguna sorpresa importante precisamente por eso, por todas las filtraciones que han ido teniendo lugar. El Google Pixel 8 es el más económico y pequeño de los dos, tiene una pantalla OLED FHD+ con un tamaño de 6,2 pulgadas, cuenta con un SoC Google Tensor G3 que tiene una CPU de nueve núcleos (un núcleo Cortex-X3 a 3 GHz, cuatro núcleos Cortex-A715 a 2,15 GHz y cuatro núcleos Cortex-A510 a 2,15 GHz) y viene con una GPU Immortalis-G175s MC10. Tiene 8 GB de RAM y 128 GB de capacidad de almacenamiento en su versión base, pero se podrá comprar con 256 GB.
El Google Pixel 8 tiene una cámara trasera de 50 MP con estabilizador óptico y una gran angular de 12 MP. La cámara frontal es de 10,5 MP, su batería es de 4.575 mAh, tiene un lector de huellas dactilares integrado en la pantalla, cuenta con certificación IP68 de resistencia al polvo y al agua y su precio es de 799 euros. Estará disponible a partir del 12 de octubre.
Con el Google Pixel 8 Pro damos el salto a un modelo más grande y potente. Utiliza el mismo SoC que el Google Pixel 8, pero tiene una pantalla OLED LTPO de 6,7 pulgadas con resolución de 2.992 x 1.344 píxeles, viene con 12 GB de memoria RAM y está disponible en tres versiones con 128 GB, 256 GB y 512 GB de capacidad de almacenamiento. También se diferencia en las cámaras traseras, ya que cuenta con una cámara principal de 50 MP con estabilizador óptico, pero añade una gran angular de 48 MP y un teleobjetivo de 48 MP. Su batería también es más grande (5.050 mAh). Tiene un precio de 1.099 euros, y estará disponible a partir del 12 de octubre.