Dreamhack nace en Suecia como un encuentro casual a principios de los 90 y en 2013 entra en los récords Guiness convirtiéndose en la LAN party más grande del mundo, juntando a 22800 personas. Desde 2010 se celebra también en Valencia. Este año la hemos visitado y hemos tenido la oportunidad de ver el stand de Newskill.

En un stand con un divertido juego de minibasket con dos contadores en el que podíamos echarnos piques con amigos. Newskill mostró 4 modelos de headsets, dos de ratones y teclados compactos Pyros y, un Gungnyr galardonado a nivel europeo que viene con mejoras en la gestión del RGB de su reposamuñecas magnético, el tacto y el sonido de sus teclas.

Junto a las revisiones de la refrigeración y torre Atria X y Krater X que tuvimos el placer de analizar, vimos en tándem esta RL con un RGB con efecto espejo en el bloque que luce espectacular y una caja completísima. Hemos podido disfrutar también de su modding, con sorteo incluido. Había varios equipos en los que los asistentes pudieron disfrutar de su hardware jugando.

Junto a varios equipos de eSports, con colas que llegaban a los 100 metros para que los fans se fotografiaran con sus jugadores profesionales favoritos y una cancha recreando Rocket League con coches de radiocontrol teníamos un escenario desde el que Newskill llevó a cabo un concurso de cosplay en el que os podemos asegurar que había nivel.

No contentos con este concurso, Newskill caldeó el ambiente con un enfrentamiento de baile con un público totalmente entregado. En este previo al concurso se repartieron regalos varios. De estos 5 contendientes, dónde ninguno defraudó, vimos movimientos latinos o divertidos bailoteos con echada de caña incluida y recogida de cable.

Se decidió al vencedor a base de ruido. Estuvo finalmente entre la mujer y el caballero armado de los extremos. El clamor del público se decantó por el caballero con algunas acusaciones de tongo. Hemos de decir que creemos que la decisión fue correcta, no teníamos nuestro sonorímetro pero, creemos que los niveles de decibelios eran ligeramente mayores aclamando al caballero y que la victoria fue justa.