Durante los últimos años no sólo estamos viendo un incremento de precio en las tarjetas gráficas sino que también hay un notable incremento de su longitud y peso, algo que puede conllevar a futuros problemas debido a que sólo se sujetan por un lateral de la caja.
No estamos hablando de nada nuevo y es que incluso algunos modelos de tarjetas gráficas de gama alta ya vienen con algún tipo de soporte y es fácil encontrar un soporte que se adapte a nuestra necesidades en tiendas de informática, pero nunca está de más comprobar el estado de nuestras tarjetas gráficas, más cuando hemos invertido una cantidad de dinero que hasta hace unos años parecía una locura.
En Tom's Hardware se hacen eco de un vídeo publicado en Youtube por KrisFix, su nombre nos sonará porque está a cargo de un un servicio técnico alemán y ya tuvo cierto protagonismo con esas Radeon RX 6000 que estaban muriendo de forma súbita, al final el problema era la venta de segunda mano de tarjetas procedentes de criptominado, un posible lavado con agua (eso nunca se confirmó pero lo hemos visto en vídeos en youtube) y exceso de humedad en su almacenamiento.
En este vídeo Krisfix repara una GeForce RTX 2080 Ti, se trata de un vídeo de 24 minutos donde nos explica cuál es el fallo de dicha tarjeta y nos muestra cómo la reparan. Esa RTX 2080 Ti es un ejemplo que expanden a todas las RTX 20, 30 y 40, además de reconocer que las Radeon RX 6000 y 7000 tampoco son inmunes a doblarse.
KrisFix comenta que está aumentando el número de RTX 2080 Ti muertas, básicamente porque son gráficas que llevan años de uso (2018) y son de los primeros modelos de un tamaño y peso excesivo. Con el tiempo estas tarjetas que sólo están sujetadas por el slot PCIe y el bracket trasero de la caja se van doblando y esto, entre otras cosas, provoca que las soldaduras de los módulos de memoria sufran y se vayan deteriorando hasta perder el contacto y empezar a dar problemas. Parece que el problema está más en que se doble en su altura que no en su longitud, por lo que un buen backplate si bien ayuda en la rigidez del PCB no sirve para evitar este problema que se genera cerca del conector con la placa base.

Aunque tiene toda la lógica del mundo lo que puede sorprender son los chips más propensos de fallos: los que están debajo del núcleo entre el conector PCI Express y el resto del PCB ahí es donde más tensión existe cuando la tarjeta empieza a doblarse y es una zona muy propensa a los cambios drásticos de temperatura, aspecto que también deteriora las soldaduras de los chips de memoria.
Las soluciones que propone son la instalación en vertical de la tarjeta, algo que con el aumento de grosor ya ni se puede plantear en muchas cajas que tenían previsto una VGA en posición vertical de 2 slots, si es más grande ya se ahogan al estar demasiado cerca de la tapa lateral, además los risers o cables extensores PCI Express 4.0 no son muy económicos.

La otra solución que nos proponen y de la que os mostramos dos ejemplos es bastante más económica ya que ronda entre los 5€ y los 15€: poner un soporte para que la gráfica no se pueda doblar, incluso por Internet hay muchas ideas caseras para ello.

Con todo no estamos ante un estudio a fondo y no hay orientaciones claras a partir de qué peso, longitud u otros factores a tener en cuenta para pensar en tomar precauciones. Está claro que una tarjeta de gama alta y gran disipación tiene más números, que si el ensamblador se ha molestado en incluir un soporte para algo será, lo que no queda tan claro es qué debemos hacer con modelos relativamente modestos como es la gama media, que sin pasar de 1 kg de peso ya puede empezar a sufrir. Sí mencionan que tarjetas a partir de 1,5 kg y 3 slots son extremadamente propensas a doblarse de forma fatal con el paso del tiempo pero más vale prevenir... o tener a un amigo experto en soldar chips de memoria.