Rocksteady no es la única desarrolladora que cree que Xbox Series S es un estorbo en la generación actual de consolas. Casi desde que se produjo su presentación se ha venido cuestionando el acierto de Microsoft al pensar y lanzar esta consola. Para los usuarios ha sido positivo, y para el mercado también, porque Xbox Series S ha llenado un vacío importante que se produjo como consecuencia de la escasez de PS5 y Xbox Series X, y también se ha perfilado como una opción económica para dar el salto a esta generación.
Para los desarrolladores es un problema porque tiene una gráfica mucho menos potente que Xbox Series X y que PS5, y porque cuenta con menos memoria unificada, lo que hace que estos no puedan fijarse una base técnica al nivel de PS5, sino que tienen que bajar al techo que les marca Xbox Series S. Parece que no es tan simple como desarrollar un juego partiendo de la base de PS5 y Xbox Series X y afinarlo reduciendo calidad y resolución para ajustarlo a Xbox Series S, y eso es lo que disgusta tanto a los desarrolladores, el trabajo extra que supone lanzar juegos para esta consola.
Ian Maclure, artista de efectos especiales en Bossa Studios, ha confirmado que muchos desarrolladores están intentando que Microsoft suprima la obligación de lanzar una versión de todos los juegos de Xbox Series X en Xbox Series S. No se puede lanzar un juego en la primera si no se lanza en la segunda, y eso es lo que quieren cambiar algunos desarrolladores. No creo que lo vayan a conseguir, porque si Microsoft aceptase ese cambio Xbox Series S acabaría, casi con total seguridad, abandonada de forma prematura.
