Intel Meteor Lake va a ser una generación de procesadores de consumo general revolucionaria, y por muchas razones: tendrá diferentes bloques de núcleos, incluyendo una VPU, utilizará el nodo de 7 nm de Intel (Intel 4) y estará construido con varios bloques de chips que diferenciarán el de computación, el SoC y el bloque gráfico, donde irá la tGPU ("tiled GPU").
La serie Intel Meteor Lake también será la primera en utilizar una GPU basada en la arquitectura Arc Battlemage, sucesora de Alchemist. Esa nueva generación de GPUs integradas a modo de "tile" o bloque serán fabricadas en el nodo de 3 nm de TSMC, pero según una nueva información han sufrido un retraso importante, y su producción en masa no comenzará hasta finales de 2023. Con esa fecha de producción en masa, lo más seguro es que Intel se vea obligada a retrasar el lanzamiento de los Meteor Lake a 2024.
Todavía no hay nada definitivo, pero también se venía rumoreando que Intel estaba teniendo problemas con el nodo de 7 nm que utilizará para fabricar los procesadores Meteor Lake, así que salvo que la situación mejore mucho parece que podemos dar casi por seguro que esta nueva generación no podrá llegar en 2023. Dependiendo de lo importante que sea el retraso que tendría que afrontar Intel puede que la compañía tenga que optar por lanzar un "refresco" de Raptor Lake para cubrir el hueco que quedará entre el lanzamiento de esta generación, previsto para finales de este año, y la llegada de Meteor Lake, que se irá a 2024.
AMD sería la principal beneficiada de un retraso de este nivel, ya que la compañía de Sunnyvale podría quedarse sola durante un tiempo considerable con sus procesadores Zen 5, que serían los rivales directos de Meteor Lake.
