DigitalFoundry ha publicado un completo análisis de la versión de Dying Light 2 para la nueva generación de consolas, y las ha comparado para mostrar las diferencias que existen entre ambas.
Dying Light 2 es un juego muy exigente a nivel gráfico, aunque ha podido ser llevado a las consolas de la anterior generación con ciertos sacrificios. No he podido confirmarlo aún, pero lo último que supe es que PS4 lo movía con calidad baja, resolución dinámica 720p-900p y 30 FPS.
En PS5 y Xbox Series X, el juego ofrece tres modos diferentes. El modo calidad que prioriza el trazado de rayos, aunque solo aplica sombras y oclusión ambiental tanto en Xbox Series X como en PS5. Este modo mejora bastante algunas escenas, pero reduce la resolución y la tasa de FPS a 1080p y 30, respectivamente.
El modo resolución sube a 3.200 x 1.800 píxeles en PS5 y a 3.456 x 1.944 píxeles en Xbox Series X, pero mantiene los 30 FPS. El modo rendimiento ofrece resolución 1080p y 60 FPS. En todos los modos, la tasa de fotogramas suele ser bastante estable, según DigitalFoundry.
La versión de Xbox Series S está por encima de la versión para la generación anterior, pero solo ofrece un modo con resolución 1080p a 30 FPS fijos, y sin trazado de rayos. Las consolas de nueva generación, salvo Xbox Series S que no utiliza esa tecnología, solo aplican trazado de rayos a sombras y oclusión ambiental (ocasionalmente también a la linterna en interiores, según Digital Foundry, pero es algo de escasa importancia), mientras que en PC esta se aplica también a reflejos y a iluminación global. Parece que Dying Light 2 queda grande a la nueva generación de consolas, al menos tras ver lo que ha compartido Digital Foundry.