El Intel Core i7-2600K ha sido uno de los procesadores más longevos de Intel, tanto que todavía hoy es perfectamente capaz de mover juegos actuales ofreciendo un rendimiento bastante bueno, todo un logro para un chip fabricado en 32 nm, basado en la arquitectura Sandy Bridge y comercializado en 2011.
Este procesador cuenta con 4 núcleos y 8 hilos a una frecuencia de 3,4 GHz-3,8 GHz, modo normal y turbo, tiene 8 MB de caché L3 y soporta overclock.
Los chicos de NJ Tech lo han utilizado en una nueva comparativa, donde lo enfrentan con el Core i3-10100F, un procesador de nueva generación lanzado a finales de 2020 que está fabricado en proceso de 14 nm++, y que cuenta con 4 núcleos y 8 hilos a 3,6 GHz-4,3 GHz, y tiene 6 MB de caché L3.
En pruebas sintéticas, el Core i3-10100F resultó ser bastante más rápido que el Core i7-2600K, y lo mismo ocurre en juegos. Incluso a pesar de que este último fue overclockeado a 4,5 GHz, el Core i3-10100F demostró estar muy por encima de aquel, algo que es normal, ya que al final este utiliza una plataforma más moderna, soporta memoria RAM más rápida y tiene un IPC mucho mayor.
No obstante, es sorprendente ver lo bien que rinde el Intel Core i7-2600K en la mayoría de juegos actuales, aunque esta comparativa también muestra que hay excepciones en las que ya se empieza a notar su edad, como Cyberpunk 2077, por ejemplo, donde hace un cuello de botella tan tremendo a la RTX 3080 que esta rinde prácticamente al nivel de una RTX 3060.
Los resultados medios confirman lo que hemos ido viendo en todas las pruebas, que el Intel Core i3-10100F representa una mejora muy grande, a pesar de que cuenta con la misma cantidad de núcleos e hilos que el Intel Core i7-2600K.