Apple y Epic Games vienen librando una intensa batalla legal cuya resolución es incierta, y podría extenderse a lo largo de los próximos años, salvo que ambas empresas decidan llegar a un acuerdo extrajudicial que les permita zanjar esas cuentas que tienen pendientes.
Cada parte está haciendo lo posible no ya para ganar, sino para dejar también en evidencia las malas intenciones de la otra parte. En una nueva ronda de alegaciones, Apple asegura que Epic Games estaba preparando la demanda mucho antes de que decidieran interponerla, y que forma parte de una estrategia publicitaria para llamar la atención de los medios y revivir el interés de estos hacia Fortnite.
Según Apple, esto se conocía a nivel interno como "Project Liberty", y fue desarrollada por Epic Games y la firma de publicidad Cravath, Swaine & Moore LLP. En este proyecto, Epic iba a representar a Apple como el chico malo que quiere "fastidiar" a Fortnite. Apple también ha comentado que, cuando Epic fue expulsada de la plataforma iOS y acusó a la compañía de la manzana de monopolio, dijo a sus usuarios que podían seguir jugando a Fortnite en consolas y en otros dispositivos, demostrando, según Apple, que sí hay competencia.
Apple también dice que Epic solo tiene interés en una cosa, el dinero. No es nada nuevo, todas las empresas comparten ese interés. Sobre esta polémica, tiene sentido lo que plantea Apple, ya que al final Fortnite es la gallina de los huevos de oro de Epic, y es verdad que el interés hacia dicho juego ha tenido sus altibajos en los últimos tiempos.
