Benchmark sigue renovando sus comparativas de rendimiento. En esta ocasión, ha publicado una prueba de rendimiento en la que miden el salto generacional que se ha producido entre tres tarjetas gráficas: las GTX 1080, RTX 2080 y RTX 3080, basadas en las arquitecturas Pascal, Turing y Ampere.
Se limitan a pruebas de rendimiento en rasterización, pero es evidente que si entramos a valorar las diferencias añadiendo trazado de rayos y DLSS 2.0 los cambios que marcó la RTX 2080 serían enormes, y merecería ser considerado como el mayor salto que se ha dado en los últimos años.
La RTX 3080 tiene 8.704 shaders, 272 TMUs, 96 ROPs, 272 núcleos tensor, 68 núcleos RT, bus de 320 bits y 10 GB de GDDR6X a 19 GHz. Por su parte, la RTX 2080 tiene 2.944 shaders, 184 TMUs, 368 núcleos tensor, 46 núcleos RT, 64 ROPs, bus de 256 bits y 8 GB de GDDR6. La GTX 1080 cuenta con 2.560 shaders, 160 TMUs, 64 ROPs, bus de 256 bits y 8 GB de GDDR5X a 10 GHz.
En rasterización, la RTX 3080 ha marcado el salto más grande por rendimiento bruto, ya que llega casi a doblar a la RTX 2080 en algunas pruebas, y marca una diferencia muy grande en todas ellas frente a la RTX 2080. Esta última también demuestra ser mucho más potente que la GTX 1080, pero el salto comparativo es menor.
Me repito, siendo justos, y añadiendo el rendimiento en trazado de rayos y el DLSS 2.0, la RTX 2080 representaría el mayor salto frente a la generación anterior, pero si nos limitamos a rasterización, gana la RTX 3080.