Los chicos de Candyland han publicado una interesante comparativa en la que muestran como luce Red Dead Redemption 2 en calidad súper baja, en calidad baja y en calidad máxima.
Red Dead Redemption 2 es un juego muy exigente que no se lleva del todo bien con las tarjetas gráficas GeForce serie GTX 900, como vimos en esta comparativa de rendimiento, pero además es un título que ofrece muchas opciones de configuración gráfica, así que al menos es posible buscar una configuración relativamente equilibrada que nos evite tener que hacer grandes sacrificios a nivel gráfico.
En el vídeo que ha publicado Candyland hemos podido ver un modo de calidad que no se puede activar de una manera tradicional, el "súper bajo". Este modo convierte Red Dead Redemption 2 en un juego que no encaja ni siquiera en la generación anterior de consolas, ya que se eliminan casi todas las texturas y todo se convierte en un conjunto de polígonos "sin alma", aunque hay que reconocer que esto le da al juego un toque "divertido".
Con la configuración en calidad baja Red Dead Redemption 2 es perfectamente reconocible y se puede disfrutar razonablemente bien, aunque la cosa mejoraría bastante solo con subir la calidad de las texturas a nivel medio.
Las diferencias que presenta Red Dead Redemption 2 al configurarlo en calidad máxima son muy grandes, este vídeo no deja lugar a dudas, pero el modo de calidad baja tampoco ofrece un resultado tan malo como cabría esperar, más allá del detalle que ya hemos comentado de las texturas.
Para jugar a este título en 1080p y calidades medias de forma fluida con medias estables de más de 30 FPS necesitamos, como mínimo, una GTX 970 o una Radeon RX 470. No es exigente ni con el procesador ni con la RAM, así que a partir de un Core i5 2500-Ryzen 3 1200 y 8 GB de RAM no tendremos problemas.