Microsoft ha confirmado que la próxima gran actualización semestral de Windows 10, conocida de momento como build 1903 (April Update 2019), reservará un total de 7 GB de espacio que será utilizado exclusivamente por actualizaciones, aplicaciones, archivos temporales y cachés del sistema.
Esto quiere decir que con esa nueva actualización Windows 10 dejará inaccesibles 7 GB de espacio, que será reservado a lo que hemos comentado anteriormente. Microsoft ha justificado esta decisión explicando que en aquellos casos en los que el usuario no cuenta con suficiente espacio libre tanto el sistema operativo como ciertas funciones y aplicaciones del mismo podrían funcionar de forma errónea, o incluso dejar de funcionar.
Al reservar esos 7 GB de espacio Microsoft se asegura de que todo funciona como es debido en Windows 10. No debería ser un problema importante para la mayoría de los usuarios, pero aquellos que tengan el sistema operativo instalado en unidades de almacenamiento SSD con capacidades relativamente pequeñas (120 GB o menos) podrían verse perjudicados.
Ese espacio reservado también facilitará a Microsoft el despliegue de las actualizaciones, ya que evitará que tengan que interactuar con los datos del usuario, reduciendo las probabilidades de que se produzcan errores que deriven en un borrado de datos.
La compañía de Redmond también ha confirmado que será posible pausar las actualizaciones durante un pequeño espacio de tiempo en Windows 10 Home, y que podremos ajustar ligeramente el espacio reservado a actualizaciones.