DigitalFoundry ha analizado en profundidad PlayStation Classic tanto a nivel de software como de hardware, y sus conclusiones no son positivas.
PlayStation Classic es una consola que mantiene el enfoque de otras como Super Nintendo Classic, es decir, integra un SoC con CPU ARM y un emulador con ROMs preinstaladas que incluyen juegos originales, lo que significa que no es compatible con los juegos en formato original y que recurre a la emulación para funcionar.

Hoy en día tenemos una gran variedad de hardware con consumos y precios mínimos que además alcanza un rendimiento bastante bueno, así que lo difícil con este tipo de consolas no viene por el lado de los componentes, sino por el lado del software.
La calidad de la emulación es básica y PlayStation Classic falla en este sentido. Los juegos en versión PAL que incluye muestran un rendimiento inferior al que tenían en la plataforma original, y los juegos NTSC tienen problemas de sincronización de fotogramas que afectan negativamente a la experiencia de juego.
PlayStation Classic tiene un SoC MediaTek MT8167A con una CPU de cuatro núcleos Cortex-A35 a 1,4 GHz y una GPU PowerVR GE8300, así que no se trata de un problema de potencia. Sus 20 juegos están almacenados en una memoria NAND Flash de 16 GB.
Sony ha utilizado una versión para ARM del emulador PCSX ReARMed que no parece haber cumplido del todo con las expectativas. Estará disponible a partir del 3 de diciembre por 99,99 euros.