Oculus Quest es un nuevo kit de realidad virtual que presume de ser totalmente autónomo. Esto significa que a diferencia del Oculus Rift no necesita estar conectado a un PC para funcionar, ya que integra todo el hardware necesario para trabajar con aplicaciones y juegos.
En términos generales el Oculus Quest viene a ser una evolución del kit Oculus Go, analizado hace nada en Noticias3D, ya que parten del mismo concepto pero cuentan con un hardware superior. No hay cambios importantes en lo que respecta al diseño, y tampoco en los acabados.
Oculus VR ha elegido el SoC Snapdragon 835 como corazón del kit Oculus Quest, un chip que fue tope de gama en la pasada generación de smartphones y que cuenta con un procesador de 8 núcleos y una potente GPU Adreno 540.
La representación de los contenidos corre a cargo de dos paneles con una resolución de 1.440 x 1600 píxeles, uno para cada ojo, cuya tasa de refresco es de 72 Hz. Su ángulo de visión rondará los 86 grados y contará con tecnología de ajuste de distancia entre las pupilas.
Por lo demás contará con 4 GB de memoria RAM y 64 GB de capacidad de almacenamiento, suficiente para ofrecer una experiencia de uso óptima y una buena vida útil. El sistema de control se sigue centrando alrededor de dos mandos con sticks analógicos.
Oculus VR ha confirmado que este kit llegará en primavera de 2019 y que tendrá un precio de 399 dólares. Su catálogo de juegos estará formado por unos 50 títulos, una cantidad aceptable que irán ampliando durante los meses posteriores a su lanzamiento.