La IA se está empezando a usar en todo tipo de tareas, desde la predicción del clima hasta la automatización de tareas, pasando por la búsqueda de cura para enfermedades o la resolución de problemas sociales. Y también en juegos. En concreto, Google ha entrenado su IA DeppMind para que juegue a Quake III y, aparentemente, está "dando para el pelo" a los contrincantes humanos.
El objetivo final de este proyecto no es que DeepMind juegue bien a Quake III: detrás está la investigación en el campo del estudio acerca de cómo los individuos se unen en equipos a modo de inteligencia colectiva. En este escenario múltiples agentes individuales aprenden a interactuar y cooperar con otros agentes, y es un problema complejo de estudiar ya que las variables cambian constantemente. Los videojuegos multijugador son una forma de estudio de estas interacciones.
Lo interesante es que DeepMind aprende a jugar sin que nadie le "diga" cómo hacerlo. Únicamente a través de los algoritmos de recompensa y jugando miles de veces contra si mismo, va adquiriendo la habilidad necesaria para ganar. Tras este proceso, Google organizó un torneo con jugadores humanos en equipos de dos jugadores tanto como oponentes como compañeros de equipo. Los equipos compuestos solo de bots (los FTW), fueron los mejores.
