Broadcom lleva tiempo persiguiendo a Qualcomm con el ánimo de comprarla. Qualcomm ya negó en su momento su intención de dejarse comprar, al menos por los 100.000 millones de dólares que Broadcom ofreció inicialmente, que Qualcomm consideraba muy por debajo de su valor real.
Esta nueva oferta, curiosamente, llega en un momento en el que la Comisión Europea ha multado a Qualcomm con nada menos que 1.200 millones de dólares por abuso de su posición dominante en el mercado. Qualcomm va a apelar, pero si se produce la venta, estos 1.200 millones tendría que pagarlos Broadcom.
Por otro lado, Qualcomm también tiene un pleito pendiente con Apple, y no parece que las tenga todas consigo a la vista de los comentarios de los analistas que predicen que Apple dejará de comprar los módem de los iPhone a Qualcomm en favor de Intel.
De producirse esta compra, aún habría que esperar entre doce y dieciocho meses hasta que finalicen los procesos de validación por parte de las entidades reguladoras de los mercados. Con todo, parece que se está más cerca de una compra que de otra negativa. Las consecuencias para el sector de las tecnologías de la información no son fáciles de prever, pero sería el fin de otro gigante del silicio.
