Samsung es un gigante que fabrica una gran cantidad de componentes, los cuales utiliza tanto para construir sus dispositivos como para conseguir ingresos vendiendo a terceros.
Recientemente anunciaron la producción de chips de memoria LPDDR4 de 8 GB a 10 nm, y también hicieron un gran avance con el almacenamiento UFS 2.1.
Según un nuevo rumor ambos elementos serán introducidos en el próximo Galaxy S8, un terminal que además vendría con un Exynos 8895-Snapdragon 835 (según país de distribución).
También se habla de un posible incremento en el tamaño de pantalla, que en el modelo Edge podría llegar a las 6 pulgadas, cosa que tiene sentido ya que ayudaría a cubrir el vacío que dejó la retirada del Galaxy Note 7.