Halo Infinite no tuvo el éxito esperado, y esto podría haber influido en la decisión de abandonar el uso de un motor propio en favor del Unreal Engine 5. Con ese camino se simplifica y abarata el proceso de desarrollo de futuras entregas, pero se renuncia a las posibilidades de diferenciación que ofrece contar con un motor propio y exclusivo. Una de las compañías que mejor ha demostrado el valor de esto es id Software, aunque Capcom también merece reconocimiento con su RE Engine.
Los despidos que ha anunciado Microsoft han generado malestar, y afectan a 343 Industries, que es la desarrolladora de la saga Halo. Antiguos desarrolladores de la franquicia han lanzado fuertes críticas contra Microsoft, y han tachado a Microsoft de tener un "liderazgo incompetente" y de haber causado un estrés masivo en los trabajadores, dos cosas que habrían impedido que Halo Infinite pudiera llegar en un estado mejor.
Otro ex-desarrollador de la saga Halo, Tyler Owens, que participó en Halo 5: Guardians, ha dicho que es un fan de la franquicia y que está cansado de las prácticas y las políticas que están matando a la franquicia que tanto quiere. También ha dicho que estas se centran en los beneficios, y que al final condenan a Halo al fracaso.
La salida de pesos pesados de 343 Industries, como Bonnie Ross, que estuvo a la cabeza del estudio durante más de 15 años, dejan constancia de que las cosas no están bien. No hay una salida fácil a esta situación, pero Microsoft debería reconsiderar el potencial de la franquicia Halo, lo que esta hizo por Xbox desde el lanzamiento de la original y el periodo de decadencia en el que ha quedado sumida desde que salió de las manos de Bungie.
